En el mundo actual, muchísimas personas sufren de insomnio. La exposición continuada a las pantallas, el estrés laboral y otros problemas de la vida familiar hacen que mucha gente tenga dificultades para dormir las horas que recomienda la comunidad médica.
Por ello, en el artículo de hoy en el blog de Running ZGZ os vamos a explicar por qué el Running es un deporte que nos ayuda a hacer frente a este problema y a que cojamos la cama con ganas cada día. Hay que empezar explicando que el running es una disciplina deportiva de gran exigencia y que se queman una gran cantidad de calorías, sobre todo cuando salimos a correr en tiempos de 4 minutos el kilómetro o de 4′ 30.
El mero hecho de desplazar nuestro cuerpo a través del espacio a esas velocidades supone un sobre esfuerzo para el organismo, que debe poner todo su empeño en impulsarse utilizando el aparato locomotor: las extremidades inferiores y el correspondiente brazeo. Solo por este motivo, al perder una gran cantidad de energía durante la actividad, vamos a coger la cama con más ganas.
El mayor amigo del insomnio es el sedentarismo, pero si realizas cualquier deporte, en especial si se trata de un deporte con gran demanda calórica como es el running, tu propio cuerpo te pedirá que te acuestes a las 11 de la noche, una muy buena hora para poder dormir las 7 u 8 horas que se recomiendan.
Sin embargo, hay que tener muy presente otro factor, y es la hora a la que salimos a correr. ¿Por qué os decimos esto? Pues porque salir a correr a las 20:00 horas al volver del trabajo o incluso más tarde, antes de cenar, puede provocar el efecto justamente contrario. Si corremos tan solo una hora antes de acostarnos lo que vamos a hacer es activar nuestro organismo y cuando estemos en la cama nos va a costar mucho más tiempo de lo normal coger el sueño.
En consecuencia, si tienes problemas de insomnio, el running puede ser una solución, pero nuestra recomendación es realizar el entrenamiento o bien a primera hora de la mañana o hacia el mediodía. Esperamos que estos sencillos consejos os vengan bien y así podáis volver a disfrutar de uno de los mayores placeres: dormir.