Rutas por Zaragoza

¿Eres de los que siempre realiza la misma ruta para tus entrenamientos de running o prefieres cambiar de vez en cuando de vistas? Si perteneces al segundo grupo, en el artículo de hoy te vamos a dar una serie de ideas de itinerarios para Zaragoza y alrededores. Información de primera mano para convertir los entrenamientos, tanto los de calidad como los de rodaje, en una actividad más amena para la vista y la mente. Comenzamos con tres rutillas predominantemente llanas: una de mayor longitud y otra menos ambiciosa.

– Parque del Agua Luis Buñuel. En las riberas del Ebro, el consistorio zaragozano desarrolló un enorme parque con motivo de la Exposición Internacional de 2008. Al terminar la muestra, el parque se ha convertido en un lugar perfecto para los runners. En esta ruta de 11 kilómetros, tan llanos como la sabana africana, podrás disfrutar de este idílico lugar situado en las afueras de la ciudad. La ruta comienza y termina en la Almozara y se recomienda hacerla a primera hora de la mañana, para evitar el intenso calor.

– Ruta en el Parque José Antonio Labordeta. Situado prácticamente en el centro de la ciudad, en este espacio verde puedes preparar una 5K en una ruta circular evitando repetir partes del recorrido. Antes del camino de la Junquera cruzaremos el canal y en nuestro plan (ver imagen) se regresa por la ribera contigua. Es una ruta también muy llana e ideal para coger ritmo o hacer series por tiempo. Y lo más importante, está arbolada en muchos tramos.

Ruta de 20 kms por Monzarbarba y Galachos de Juslibol. Este circuito circular alterna tramos pavimentados y tramos de gravilla. Lo mejor de esta opción es la variedad de espacios, que van desde las riberas y terreno de huerta, a arboledas y un largo trayecto a la vera de los montes de Juslibol. En muchas partes del recorrido podrás disfrutar de la soledad total, para poder coger tu cadencia sin interferencias de otros corredores.

Pendientes, para reforzar la musculatura de las piernas
Si lo que buscas son rutas con algo de pendiente, te vamos a mostrar dos opciones de
diferentes longitudes.

– Seguimos en la línea de distancia media, pero con una subida por vía Hispanidad y el Tercer Cinturón que suma un total de 120 metros de desnivel. Es un buen entrenamiento para una mediamaratón: 12 kilómetros para ir cogiendo forma y endureciendo.


– Terminamos con una ruta larga de 25 kilómetros y con 200 metros de desnivel, por la Cuesta de las Cabras, en las inmediaciones de Cadrete. Es una ruta mayormente sin asfaltar y se hace relativamente cómoda porque se puede coger el tono antes de llegar a la parte empinada del recorrido, en donde nos exprimiremos al máximo para recuperarnos en una suave bajada hasta la ciudad, de regreso a casa.